Los acosadores de constitucionalistas del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona denunciados al Juzgado
La titular del juzgado de instrucción 2 de Barcelona ha admitido a trámite la demanda presentada por el vicepresidente de SCC, Álex Ramos, y el Sindicato Médico de Cataluña (SIMECAT) contra el expresidente del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona, Jaume Padrós, y el exdirector general corporativo, Marc Soler, por discriminación ideológica con agravante de odio.
Se habla mucho de amnistía a los que intentaron separar Cataluña de España, de los indultos por diversos delitos (entre ellos alguno de tipo económico) que hizo que pasaran algunos de ellos por prisión. De las fórmulas para que Laura Borrás no cumpla condena cuando no tiene nada que ver con la política si no con el mal uso de la misma. Y, sobre todo, de lo que hay que hacer para corregir esa deficitaria ley de la amnistía para que recoja los delitos cometidos por Carles Puigdemont y pueda volver a España sin paso previo por los Juzgados.
Pero no se habla de lo que muchos de estos individuos, y otros tantos que estaban en la órbita independentista, fueron capaces de hacer durante el tiempo en el que en Cataluña se ataban perros con longanizas cuatribarradas. Uno de esos casos es lo que le ocurrió a uno de los miembros más activos y comprometidos de Societat Civil Catalana, el doctor Alex Ramos, que fue perseguido, discriminado ideológicamente y despedido, por sus jefes del Colegio de Médicos de Barcelona, de entonces, Jaume Padrós y Marc Soler.
Tras dos años de hostigamiento, el COMB despidió al doctor Álex Ramos en 2020 por su activismo contra el independentismo desde Societat Civil Catalana. Y ahora, al parecer, la justicia admite a trámite su denuncia por persecución política y delito de odio. Es intolerable que un ciudadano deba pagar un coste profesional o personal por defender el marco constitucional. Ahora será la Justicia quien investigue los hechos.