El peor enero cierra con 242.148 afiliados a la SS menos y 38.725 parados más
La estacionalidad sigue marcando las estadísticas de empleo en España y, una vez más, el año ha comenzado con la destrucción de puestos de trabajo y con más personas engrosando las listas de desempleo del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). El fin de la campaña de Navidad y la temida cuesta de enero, con el turismo y el consumo en su fase más baja, han dejado 242.148 afiliados a la Seguridad Social menos y 38.725 parados más. Se trata de la caída en el número de cotizantes más pronunciada de los últimos cinco años. Peor que en la época Covid.
Los datos publicados este martes por el Ministerio de Seguridad Social reflejan una caída del empleo del 1,13%, en línea con el comportamiento de este mes en los dos últimos años, subrayan desde el departamento que dirige Elma Saiz: en enero del año pasado se perdieron 231.250 empleos y en el arranque de 2023, 215.047. Sin embargo, la destrucción de 242.148 puestos de trabajo en términos absolutos es la más pronunciada de los últimos cinco años. Solo se superó este registro en 2020, en la antesala de la pandemia (-244.044).
La cifra también se sitúa por encima del repunte medio experimentado entre los años 2014 y 2019 (-190.981), años de recuperación tras la crisis económica. Cabe recordar que en todos los eneros desde 2001 se han observado pérdidas de afiliación, la más acusada en 2009, cuando la crisis financiera se llevó por delante casi 350.000 empleos. Pese a ello, el número de afiliados sigue batiendo todos los registros y cierra el primer mes del año con un total de 21.095.814 inscritos a la Seguridad Social, la cifra más alta en la serie histórica para un mes de enero. Son 491.053 cotizantes más que hace un año (+2,38%).
Por sexos, cae el número de mujeres cotizantes por debajo de los 10 millones (9.975.868), tras la pérdida de 133.333 afiliadas; si bien es el mejor nivel de empleo femenino de un enero de la serie histórica, en comparación con el nivel previo a la reforma laboral. En el caso de los hombres, el primer mes del año cierra con 108.815 ocupados menos, dejando el total de afiliados en 11.119.946.
En lo que respecta al número de parados, en el primer mes del año se inscribieron 38.725 personas más en las listas del SEPE. Son 21.679 menos que el año anterior (+60.404) y una cifra por debajo de la media histórica registrada en el primer mes del año, destacan desde el Ministerio de Trabajo. De esta forma, el paro registrado se ha situado en 2.599.443 personas, cifra que supone un descenso de 168.417 desempleados respecto al año anterior. Es el nivel más bajo para este mes en los últimos 17 años.
Por sectores, los Servicios vuelven a acaparar el grueso de la caída, con 44.595 desempleados más, hasta el punto de que explican todo el incremento del paro en el mes de enero. La Agricultura, por su parte, registra 1.099 parados más; mientras que en el resto, disminuye: en la Construcción, en 4.527 personas; en la Industria, en 241; y entre el colectivo Sin Empleo Anterior, en 2.201.
Por sexo, destaca el aumento del desempleo femenino en enero, en 31.869 personas (el 82% del total), lo que eleva el total de paradas hasta 1.563.431, si bien es su nivel más bajo en los últimos 17 años en un mes de enero. En el caso de los hombres, el desempleo se incrementa en 6.856, hasta 1.036.012.
A su vez, el desempleo de los jóvenes menores de 25 años sube en 2.563 personas, hasta los 188.364, anotando también la cifra más baja de la serie histórica en un mes de enero.
En definitiva y a pesar de que el Gobierno quiera pincelar los datos para que el impacto mediático disminuya y los españoles lo vean todo color rosa la realidad es que, a 1 de febrero, existen 242.148 nuevas familias con el drama de no tener trabajo.