Pilar Diaz ha sido nombrada delegada territorial del Govern en Barcelona y deja la alcaldía de Esplugues tras 18 años

Adiós alcaldesa, adiós

Por fin Pilar Díaz ha dejado la alcaldía de Esplugues de Llobregat. Prácticamente ha transcurrido un mes desde que fuera nombrada delegada territorial del Govern en Barcelona, pero ella seguía ejerciendo de alcaldesa. Y es que es muy difícil marcharse tras 18 años ejerciendo el poder absoluto.

Pilar Diaz en el acto de posesión del cargo. Foto govern.cat
photo_camera Pilar Diaz en el acto de posesión del cargo. Foto govern.cat

La figura de la alcaldesa de Esplugues, desde que asumió el poder a mitad de la legislatura en 2006 hasta este año, ha estado marcada por muchas luces y sombras. Una alcaldesa que, con mano de hierro, ha mantenido durante 18 años el gobierno del PSC en Esplugues, logrando un récord de 45 años de gobierno socialista en el municipio.

Muchos dirán que la democracia debería propiciar la alternancia en el poder, donde diversas voces de la sociedad tengan la oportunidad de expresarse y ser representadas. Tener la oportunidad de que distintas ideas políticas gobiernen debería ser algo constructivo. Pues bien, en el caso de Esplugues, esto no ha sido así. El gobierno perpetuo del PSC nos ha dejado tres alcaldes en 45 años, con una gestión continua e ininterrumpida.

Es cierto que el gobierno socialista en Esplugues cuenta con apoyo popular, pero los últimos 45 años, y más concretamente los últimos 18, han sido un laboratorio de ensayo de cómo gobernar a lo socialista, algo que tanto el señor Sánchez como el señor Illa están emulando en sus respectivos gobiernos. Es decir, se ha aprovechado el tiempo para colocar a personas afines, dejando sin opción a quienes no son obedientes al partido socialista para asumir cargos de responsabilidad civil en el municipio.

En fin, durante los últimos 18 años, el gobierno socialista de Esplugues ha hecho muchas cosas por el bien del municipio, pero también ha tomado decisiones que han tenido detractores. El "agujero de la vergüenza" en la plaza Cataluña, que iba a ser un anfiteatro de renombre en el Baix Llobregat, sigue sin construirse 16 años después de haber comenzado la obra. O las molestias que causó en su día la construcción del tranvía (Tram-Baix). También está el caso de la gigantesca piscina en el parque de Torrents, donde se practicaba piragüismo, pero que fue eliminada debido a la sequía de años atrás.

Otras decisiones controvertidas incluyen la construcción del nuevo polideportivo de Les Moreres, que eliminó una piscina municipal al aire libre, y su diseño poco atractivo encajado en medio de la zona histórica del municipio. El cierre de la piscina descubierta de Can Vidalet y la construcción del nuevo polideportivo de esa área son también ejemplos de gestiones criticadas bajo el mandato de la alcaldesa.

En las últimas elecciones, la alcaldesa pudo revalidar su mayoría absoluta, aunque esto solo duró un año debido a la deserción de uno de sus ediles, lo que forzó al PSC a formar una coalición con sus rivales a su izquierda, los Comunes.

Hay muchas cosas que no caben en este artículo, pero en general se podría decir que la gestión del PSC en Esplugues ha sido correcta en muchos aspectos, pero en otros ha dejado bastante que desear. Sin embargo, la habilidad política de la alcaldesa ha hecho que la opinión pública solo perciba la parte positiva de su gestión. Ahora que se marcha a la Delegación del Gobierno de Cataluña en Barcelona, deja atrás un Esplugues encaminado hacia un futuro mejor.

Con la partida de Pilar Díaz, se cierra un capítulo de 18 años en la historia de Esplugues. El tiempo dirá si las sombras de su gestión pesan más que las luces que dejó tras de sí

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