Desde las primeras elecciones a la presidencia de la FCF, a las segundas que tuvieron lugar el 13 de febrero de 2023, Soteras y su equipo siguieron al frente de la Federación. Con lo cual tenían la infraestructura a favor para seguir con la trama ilegal para mantenerse en el cargo. Por eso Juanjo Isern y Andreu Subies, los otros dos candidatos, pusieron un recurso al Tribunal Catalán del Deporte pidiendo que este interviniera y se pusiera una junta gestora. Álex Talavera no quiso presentar el recurso conjunto con Isern y Subies, prefiriendo ir por libre. Talavera comentó que le habían puesto unas condiciones inaceptables. Este hecho levantó sospechas, pero poco más.
Todo hubiera quedado en una simple anécdota si no se supiera la realidad de aquella actitud de Álex Talavera. Ahora se ha conocido la verdad gracias a los teléfonos que intervinieron los Mossos d’Esquadra, cuya investigación ha sido entregada al juzgado de instrucción número 2 de Sabadell. Recordemos que se intervinieron los de Joan Soteras, Víctor Güell, José Miguel Calle, Francisco Guerrero, Antonio Prieto, Álvaro Montoliu, Jesús Manchado Villena y Jesús Manchado Lozano, tanto padre como hijo. Asimismo, han sido esclarecedoras las conversaciones por Whatsapp.
Los que lo conocen, antes de la investigación de los mossos d’esquadra, opinaban de él que era una persona sin principios ni lealtades. Que puede cambiar radicalmente de posicionamientos por sus propios intereses. La mayoría de las personas que estuvieron con él en campaña, a los cuales dejó abandonados, hoy en día lo desprecian y lo consideran un traidor profesional. También presume de controlar el PSC, cosa que es falsa. Según explican es un florero que se mueve siguiendo instrucciones de los que le ordenan como debe actuar. Ha seguido las órdenes de Andrés Manzano, que desde 2024, ya no es director general de la UE Cornellá, y de José Miguel Calle, director general de la Federación Catalana de Fútbol.

Álex Talavera estuvo negociando con José Miguel Calle para conseguir beneficios propios dentro de la Federación Catalana de Fútbol. Para lograrlo le pidieron que retirara el recurso del Tribunal Catalán del Deporte. Al día siguiente de retirar dicho recuerdo, por miedo a posibles ataques por parte de personas vinculadas con su candidatura y los otros candidatos, le mandó un mensaje a Calle diciéndole que “me estoy dejando la cara y la piel por ti y por Joan. No me falléis”. Y Calle no le falló. ¿Qué hizo?
Calle colocó a Gemma Deumal Ametller en el departamento de fútbol femenino; a Javier Sánchez Camacho en la Escuela de Entrenadores; David Checa Casas, que fue el abogado del recurso, como presidente del Comité de Ética Deportiva con contrato mercantil. El único que no quiso Juan Antonio Dopazo Alday. Todos ellos formaban parte de la candidatura de Alejandro Talavera Nos.
Por su parte el vicepresidente de la FCF y delegado de la misma en Gerona, Jordi Bonet, una de las manos derechas de Soteras, le mandó un audio a Calle explicándole que Gemma Deumal le pedía la razón social para hacerle la factura al notario. Y añade “los de Talavera aquí en Girona, Miquel y Claudia, quieren que les acompañemos al notario… Así verán que vamos juntos y que deben votar Joan [Soteras]”. Con lo cual el rechazo de ir de la mano de Isern y Subies no era porque le propusieron unas condiciones inaceptables, sino porque llevaba tiempo pactando con Calle una lista conjunta, en beneficio suyo y no para favorecer el fútbol catalán. Según han podido averiguar los Mossos d’Esquadra, estas conversaciones se iniciaron el 19 de octubre de 2022, varios meses antes de las segundas elecciones.
Con respecto a lo que hemos dicho que Talavera vendía buenos contactos con el PSC, en septiembre de 2023 le comentó a José Miguel Calle que iría a la Secretaria General del Deporte, en algún cargo. A estas declaraciones Calle le comentó que “no les des muchos indicios de que estás muy cerca a nivel de negocio y de pacto conmigo, porque entonces le das valor a su relato. Ten cuidado y mide bien el planteamiento, ¿de acuerdo? Tienes que quedar como una víctima y que te hicieron la pirula”. Talavera le contestó “estoy de acuerdo”.

Lo cierto es que los únicos que han movido algún hilo con respecto a todo este turbio asunto vinculado con la Federación Catalana de Fútbol fue ERC. En junio de 2024 la vicepresidenta del gobierno catalán, Laura Vilagrà, pidió que Joan Soteras y su junta directiva dieran un paso al lado. Añadiendo que “ya basta que el fútbol catalán esté en el ojo del huracán por presuntas corruptelas o tergiversación de documentos y que sus dirigentes se alejen de los valores de la honestidad y la transparencia”. Desde que el PSC dirige el Departamento de Deportes, con “Berni” Álvarez Merino, y la secretaria general de deportes, con Abel García, el silencio ha sido absoluto, esperando que la justicia decida, sin enfrentarse a un presidente, Joan Soteras, y una junta que llevan 25 meses ostentando unos cargos que consiguieron fraudulentamente.
Paralelamente a todo esto y a los silencios políticos, Miguel Galán, presidente del Centro Nacional de Entrenadores de Fútbol, a través de la Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte, ha pedido al juez de Sabadell la imputación de Álex Talavera por delitos muy graves de corrupción.