Las Rondas, un embudo constante
Por un lado, tenemos un accidente en la Ronda Litoral, a la altura del Morrot o zona de Montjuic, entre un camión y dos vehículos que ha parado, completamente, el tráfico en dirección sur desde Sant Adrià del Besós y Maresme. Unos 9-10 kilómetros de cola ha provocado el accidente y el cierre de la B-10 hasta las 10,30, aproximadamente, cuando se ha reabierto parcialmente la circulación. Ya se sabe que un accidente en las rondas barcelonesas hacen imposible la circulación por las mismas así como colapsa la ciudad de punta a punta, que es lo que ha acabado sucediendo finalmente..
⚫ Tallada la ronda Litoral/B-10 al Morrot en sentit Llobregat per un accident. Hi ha retencions de 9 km des de Sant Adrià de Besòs. pic.twitter.com/mb0ihc0prp
— Trànsit (@transit) March 6, 2025
Otro accidente más en la AP-7
Que la AP-7 se colapse a causa de un accidente casi ni es noticia. Si no es por un choque múltiple a la altura de Sant Cugat, lo es por otro a la altura de Barberá del Vallès o por otro a la altura de Santa Perpetua de la Mogoda. Y, si no, como hoy, lo es a la altura de Granollers-La Roca o más hacia el norte. Cada semana ocurre lo mismo.
El accidente de hoy entre 4 vehículos a la altura de la Roca del Vallès ha provocado el cierre de 2 de los 3 carriles de circulación durante horas y colas de más de 7 kilómetros en dirección Sur, hacia el Vallès. Congestionando, como es obvio, al resto de las carreteras con acceso desde Granollers y Mataró. En el momento de la redacción de la noticia se ha abierto un carril más y se espera restablecer el tráfico antes del mediodía.
❌ Resta el carril esquerre tallat a l'AP-7 a la Roca del Vallès en sentit sud/Tarragona, atès que la tanca de l'autopista ha quedat malmesa.
— Trànsit (@transit) March 6, 2025
🔴 Es mantenen retencions de 7 km des de Llinars del Vallès. pic.twitter.com/jUSst73mNX
En cualquier caso, lo sucedido hoy a los barceloneses no deja de ser una muestra más de lo que nos ocurre todos los días a aquellos que no tienen la suerte de poder desplazarnos en metro o autobús pues no son de la capital y deben buscarse “las habichuelas” allí donde están las empresas. La alternativa, que bien podría ser Rodalies, da mas miedo y retrasos que soluciones, al margen del “pequeño” detalle de la inseguridad. Por lo que el catalán trabajador medio se ve obligado, en demasiadas ocasiones, en utilizar el vehículo privado, o en compartirlo, para ir a su puesto de trabajo.
Mientras tanto, en Cataluña llevamos más de 30 años peleándonos por frenar el famoso 4º Cinturón o B-40 que, parece, va a llegar a Sabadell pero no va a enlazar con Granollers ni Mataró. La alternativa obligada actual es la famosa AP-7 de los reincidentes accidentes que, es obvio, se muestra como muy saturada y más tras la eliminación de los peajes. Por eso, un problema en La Roca afecta desde Girona, prácticamente, hasta Terrassa o Martorell y Barcelona área industrial, pues colapsa la única gran vía de comunicación del área metropolitana catalana. Y seguimos sin soluciones políticas.
