El pleno municipal de Mataró de esta semana ha contemplado aprobar una curiosa moción presentada por Junts en la que se solicita al equipo de gobierno que dirige el alcalde Bote, que se actúe activamente contra el incivismo de algunos ciudadanos y se valore económicamente el impacto de esas actitudes incívicas a través de un programa, herramienta o servicio que pueda valorar esos extra-costes tan dañinos para la ciudad que, sin análisis definitivo, podría estar cercano al 1,8 millones de euros/año.
Con ello se pretende no sólo concienciar al ciudadano ante el incivismo si no conocer el coste de lo que provocan dichas actitudes y la cantidad de servicios que se dejan de dar a los ciudadanos por culpa de ese coste extra, para que dimensionen el dinero perdido por culpa de unos bárbaros incívicos.
La moción fue aprobada casi por mayoría absoluta. Presentada por Junts x Mataró tuvo los votos a favor de PSC, ERC, Junts x Mataró, PP, ECPM y CUP. El partido VOX fue el único que votó en contra.
Sube la presión fiscal en Mataró
Aunque se intentó explicar que la presión fiscal para el 2.025 será inferior que la del presente año, la realidad es muy evidente y no deja lugar a dudas. El IBI sube un 5% y la tasa de recogida de basuras un 12%, muy por encima de lo que suben los ingresos de los ciudadanos. El resto de las tasas y servicios ronda el 2% y se aproximará a la subida del IPC.
La subida de tasas e impuestos municipales fue aprobada por el equipo de Gobierno compuesto por Psc y Comunes, contó con la abstención de Junts y Erc y el voto en contra de PP, Vox y Cup.
