Aunque es cierto que en el marcador nunca se fue por demasiados goles de diferencia el Granollers, también es verdad que el partido estuvo controlado, prácticamente, durante los 60 minutos que duró y, especialmente, durante toda la segunda parte por los chicos de Antonio Rama. Al descanso vencían los vallesanos por 15-17 pero es cierto que los 29 minutos anteriores fueron de mucha igualdad y los oscenses lucharon con todas las armas que dispusieron, viendo una reñida primera parte de uno arriba, uno abajo, todo el rato.
Tras el descanso los catalanes apretaron el acelerador y no dejaron acercarse al rival con ventajas de 3-4 goles. Lo suficiente para no pasar apuros al final. Es importante mencionar dos nombres propios en el partido del viernes noche: Víctor Romero, que venía tras estrenar internacionalidad con la selección absoluta de balonmano, y Jordi Deumal.
El mataroní Romero consiguió ser el máximo anotador del partido con 7 goles (junto a Ignacio Suárez del Huesca) pero con unos guarismos estratosféricos: 7 goles de 8 intentos. Y lo que es más resaltable aún: 5 de ellos de contrataque cuando, prácticamente, jugó casi todo el partido como eje de la defensa. El caso de Jordi Deumal también es para resaltar: 6 goles de 6 lanzamientos, 2 de 7 metros, 1 de contraataque y 3 desde el extremo, su posición natural. Deumal ha conseguido transformar en gol todos los lanzamientos de 7 metros ejecutados en la Liga Asobal, convirtiéndose en un gran especialista en esa difícil distancia.
Martes partidazo contra el Górnik Zabrze: ganar o ganar
Martes, 18,45 horas, Palau d’Esports de Granollers: BM Granollers- Górnik Zabrze. O, diciéndolo en román paladino, el martes el Granollers se juega mantenerse en Europa o poner velas a todas las vírgenes que se conozcan. Nos explicamos.
Granollers y Silkegorb danés tienen los mismos puntos (4), ambos han ganado dos partidos y han perdido dos y ambos tienen dos partidos pendientes ante los mismos rivales: Górnik Zabrze y Montpellier. Teniendo en cuenta que los franceses del Montpellier están casi clasificados salvo que perdieran los dos partidos que le quedan, cuestión difícil de creer dado su nivelazo, resta por dilucidar únicamente qué equipo pasaría como segundo a la siguiente fase (Main Round). Con un detalle añadido importante, cuentan los puntos de esta fase para la siguiente.
A nivel de goal average entre los dos segundos, claramente sale beneficiado el Granollers (+9 en casa y -3 en Dinamarca) por lo que un resultado de victoria ante los polacos es absolutamente vital y con eso contamos. El mismo martes se celebra, dos horas más tarde, un importantísimo, para nuestros intereses, Silkeborg – Montpellier.
Si ocurre lo que debería suceder y siempre que los franceses no quieran complicarse la vida en la última jornada y ganen en Dinamarca, los de Antonio Rama, venciendo al conjunto polaco en Granollers, tendrían suficiente para clasificarse y podrían viajar el próximo 26 de noviembre a la cercana Montpellier sin jugarse nada más que la honrilla de un gran partido de balonmano ante un estupendo equipo de Champions. En caso contrario, ya saben, a poner todas las velas para el Zabrze gane a los daneses en el último partido y no nos obliguen a vencer al Montpellier a domicilio.
Górnik Zabrze, un equipo duro y rocoso
No se piensen que el Zabrze es un equipo fácil. Todo lo contrario. Los cuatro encuentros que ha perdido en Europa lo han hecho de sólo 4-5 goles como máximo, tras partidos duros, difíciles y con una defensa agresiva capaz de intimidar al más pintado. No es malo recordar que el Balonmano Granollers consiguió vencerles a domicilio por 32-36 en la primera jornada, pero tampoco es malo recordarles que tuvieron delante a un sublime equipo de Antonio Rama. El Górnik Zabrze ha perdido cuatro partidos en su liga por solo 1-2 goles de diferencia, lo que demuestra su capacidad competitiva.
Ayer sábado perdieron en su encuentro liguero frente al MMTS por 21-28, dando a entender que estaban reservando varios jugadores dado que venían resentidos, algunos de ellos, tras la semana de selecciones nacionales. En cualquier caso parece, según las crónicas de los diarios polacos, que están dando por perdida la Europe League y van a dedicarse a preparar la “SuperLiga” con el fin de evitar quedar entre los últimos 6 clasificados en la Liga y en la lucha por la permanencia. Ahora mismo están en esa posición que una victoria te salva de la quema y una derrota te mete de lleno en el desastre, en su competición nacional.