Pase lo que pase, hoy ha quedado inaugurada la temporada primaveral-estival de terrazas abarrotadas de gente estrujando los últimos minutos soleados del día y, los que tienen suerte de disfrutar del mar, saboreando esos estupendos atardeceres que la extensa costa española nos regala.
España entera cambia de ritmo cardiaco, de ritmo de vida y de parámetros mentales a partir de hoy. Los españoles nos regalamos la ocupación de las calles y de sus terrazas, tanto en capitales como en los pueblos, con el fin de disfrutar de esta maravilla. Y, claro, también van a volver las colas interminables a ultima hora de la tarde desde las playas o las montañas porque como hay más luz todos disfrutaremos de un rato más de diversión, de paz… y de caravanas.
Bienvenidos a la primavera, bienvenidos al sol.
