1. Estación de Granollers Centre:
El 22 de julio de 1854, a las dos y media del mediodía, Granollers entraba en el entonces reducido club de ciudades con ferrocarril, tras la inauguración del camino de hierro que comunicaba Barcelona con la capital del Vallès Oriental. Aunque apenas habían transcurrido seis años desde la apertura de la primera vía férrea peninsular, la línea que comunicaba la ciudad condal con Mataró, la pujante economía catalana de mediados del siglo XIX exigía mejorar su red de transportes de la mano del tren.
La línea que llegó a Granollers era parte del trazado ferroviario entre Barcelona y Gerona, que posteriormente se extendió hacia el norte. Este tramo inicial fue promovido por la compañía Camino de Hierro del Norte, una de las pioneras del ferrocarril en España. La construcción de esta línea fue motivada principalmente por la importancia económica de Granollers como centro comercial y su proximidad a Barcelona, lo que facilitaba el transporte de mercancías, como productos agrícolas y textiles.
La llegada del tren marcó un cambio significativo en el desarrollo económico y social de la región, mejorando las comunicaciones y fomentando la industrialización y el comercio en Granollers y sus alrededores.
La inauguración
En la primavera de 1854 llegaron las dos primeras locomotoras construidas por Sharp, con las que se pudo imprimir un mayor ritmo a los trabajos de construcción de las vías. En el verano de 1854 las obras ya se encontraban muy adelantadas, al tiempo que se iba recibiendo el material motor y remolcado necesario. Así, aunque el momento no era el más propicio, en un inestable clima político tras la “Vicalvarada” del general O’Donnell, las revueltas de los trabajadores del sector textil contra la implantación de maquinaria moderna que implicaba el despido de miles de obreros (el denominado conflicto de las selfactinas) y el inicio de una grave epidemia de cólera en la región, los promotores del Camino de Hierro del Norte no quisieron esperar más para poner su ferrocarril en servicio y el 22 de julio de 1854 se procedió a la solemne inauguración del ferrocarril de Barcelona a Granollers, la segunda vía férrea de Catalunya.
La novedosa estación de Granollers se construyó donde ahora está situada la plaça de Barangué (más conocida como Plaça del cony) y el edificio de Correos actual, mientras que las vías trascurrían por lo que hoy conocemos como Avenida Sant Esteban, Avenida del Parque y Calle Gerona, así como parte del actual Parque Torras Villà.
La primera estación de Granollers se mantuvo en ese emplazamiento más de 100 años, concretamente hasta 1958.
Traslado y modernización pasando por Kansas City
En 1958, la estación fue trasladada a su ubicación actual debido al crecimiento urbano y a la necesidad de reubicar las vías para evitar el cruce de trenes por el núcleo urbano. En esa nueva ubicación se ocuparon gran cantidad de terrenos y se construyó un importante nudo ferroviario para mercancías y pasajeros.
El edificio provisional de la estación entonces denominada popularmente “Estación de Francia” y oficialmente bautizado como “Estación Granollers-Centro”, estaba construido totalmente de madera y daba la impresión de ser más del “far west” (por pobre y por tener pinta de otro tiempo) de las populares películas “de vaqueros” de la época, que de una de las ciudades industriales más importantes de Cataluña. Por eso se le bautizó popularmente como la “estación de Kansas City”. No sólo Sevilla tiene una importante avenida con ese nombre que, además, es la que lleva a su popular estación ferroviaria. Granollers también puede presumir de tal particularidad.
La lástima es que 6 años después las obras del edificio de la nueva estación de Granollers-Centro finalizaron, siendo inaugurado el nuevo y moderno edificio hace 60 años, en 1.964. Prácticamente, tras mínimas modificaciones, es el que podemos contemplar hoy en día. Ahora sólo queda para la memoria y la hemeroteca el recuerdo del simpático mote de nuestra nueva estación de Francia, antigua estación de madera de Kansas City, ciudad sin ley.
2. Estación de Granollers-Canovelles (anteriormente Estación del Norte):
La estación de Granollers-Canovelles (PK 28,7 de la línea Barcelona-Vic-Ripoll- San Juan de las Abadesas) se sitúa en el término de Granollers, en la zona noreste de éste y muy cercana a Canovelles.
La Estación de Granollers-Canovelles, anteriormente conocida como Estación del Norte, se inauguró en 1896 como parte de un ramal ferroviario que conectaba Granollers con Montcada, enlazando con la línea de Manresa. Este ramal se construyó para evitar el pago de cánones a la compañía MZA por el uso de la línea de Girona.
La línea de Barcelona a Sant Joan nació con el objetivo de transportar el carbón desde el Pirineo hasta Barcelona, por lo que utilizaba la línea de Francia entre Granollers y la ciudad condal. En 1876 se ponía en servicio el tramo entre Granollers y Vic y en 1880 llegaba hasta Ripoll y Sant Joan de les Abadesses. En 1883 se creaba una línea propia desde Les Franqueses hasta Montcada, donde enlazaba con la línea de Manresa y que llevaba directamente a Barcelona.
Formará parte de la Compañía de los Caminos de Hierro del Norte de España. El tramo de Ripoll a Puigcerdà nació con vocación internacional, al enlazar con Puigcerdà y La Tor de Querol y con la red francesa de ferrocarriles. Incluso se había planteado en varias ocasiones la conversión de la línea a ancho internacional, aunque que nunca se llegó a ejecutar.
La estación de Granollers-Canovelles, o estación del Norte, forma parte de la actual línea R3 de Rodalies de Catalunya y mantiene su importancia como punto de conexión ferroviaria en la comarca del Vallés Oriental con las comarcas de Osona y Ripollés. Por el momento, sigue teniendo de una sola vía aunque está en proceso de ampliación a la segunda, desde Barcelona hasta La Garriga, durante el presente 2025.
3. Estación de Granollers Nord – Les Franqueses:
Las Franquesas-Granollers Norte es una estación ferroviaria situada en el municipio español de Las Franquesas del Vallés a escasos 50 metros del límite con Granollers. El edificio de viajeros dispone de máquinas de venta automática de billetes, la taquilla y una cafetería. Existe también un aparcamiento exclusivo para clientes. Es una estación de concepto más cercano a un apeadero que de estación tradicional con todos los servicios y personal.
La estación se encuentra en el punto kilométrico 30,7 de la línea férrea Barcelona-Cerbère en su sección entre Barcelona y Massanet El tramo es de vía doble y está electrificado. De hecho, es una estación distante poco más que dos kilómetros hacia el norte de la estación de Granollers Centre que fue inaugurada en el 2.002 que da servicio a los trenes de Rodalies de la actual R2.
Dicha estación se construyó tras la presión conjunta ejercida por los Ayuntamientos de Les Franqueses del Vallés para cubrir las necesidades de una densa zona de población (el barrio de Bellavista) muy distante de la estación del centro de dicha localidad, así como la presión del Ayuntamiento de Granollers para cubrir los barrios del norte de la capital vallesana.
Cuenta con dos vías generales (vías 1 y 2) con andenes laterales cubiertos parcialmente por marquesinas metálicas. El edificio de viajeros se sitúa en perpendicular a un nivel superior sobre las vías. El enlace entre los andenes y el vestíbulo de la estación se realiza a través de un conjunto de ascensor, escalera fija y escalera mecánica para cada vía.
